jueves, 19 de enero de 2012

¿Por qué este blog?

Si tu hermano te ofende, ve y amonéstalo, tú y él a solas. Si te escucha has ganado a tu hermano.Si no te hace caso, hazte acompañar de uno o dos, para que el asunto se resuelva por dos o tres testigos.Si no les hace caso, informa a la comunidad. 

¿Qué pena merece esta gente?
Pero a quien escandalice a uno de estos pequeños que creen en mí, más le valdría que le colgasen al cuello una piedra de molino y lo arrojaran al fondo del mar. 
MATEO c.18, 6

martes, 6 de septiembre de 2011

Carta de los padres de 5º sobre Herminia Martínez Gómez

Herminia Martínez Gómez era la profesora de lengua y matemáticas del grupo de 5º y la autora de los insultos a niños de diez años, como vemos, con conocimiento de la directora Begoña Criado Hernanz. ¿Cómo reaccionó ésta? Que lo explique.


viernes, 2 de septiembre de 2011

Al defensor del menor no le preocupa un menor...ni la ley


Este es el trámite que el Defensor del Menor de la comunidad de Madrid debe seguir (según su propia presentación). ¿Por qué no lo hizo en este caso?. ¿Por qué al recibir la queja por maltrato de un menor no abrió siquiera un expediente? Según las propias palabras del representante de esta institución, dieron por buenas las explicaciones de la dirección del colegio:

1. que si bien había numerosas quejas sobre la profesora Herminia Martínez Gómez, también había dos cartas a favor. 
(¿Aparecerán esas dos cartas?, ¿qué valor tienen dos cartas a favor de una maltratadora?)

2. que la madre de Javier insultó a los profesores y tuvo que intervenir la Policía municipal de Las Rozas. Sin embargo este dato falso es perfectamente contrastable con la policía. ¿por qué la directora, Begoña Criado Hernanz, miente?
Hay denuncias cruzadas, pero en la que presenta la directora (¡pidan copia!)  no aparece acusación de insulto alguno. Es por:
1- amenazas (sic) de llevar el caso a los medios. Ridícula acusación cuando el programa espejo público de Antena 3, había ya dedicado 13 minutos a este tema siete días antes!!!.¿Tanto miedo tenían a que se conozca la verdad de su incompetencia? ¿tanto miedo tiene el colegio como para colgar el teléfono al periodista? ¿tanto miedo tiene Herminia Martínez Gómez como para colgar el teléfono al periodista y ese mismo día dar de baja la línea? y 
2- por asegurar que haría lo posible por mantener a estas personas dañinas apartadas de los niños. Lo que para mí y para todos debía ser un compromiso moral

miércoles, 27 de julio de 2011

Todos confían en la ley, ¿alguien lo hará en la justicia?

La Ley Orgánica de Educación deja en manos del profesorado la decisión sobre la promoción al finalizar cada uno de los ciclos (2º, 4º o 6º de primaria), en función de la información y el criterio del tutor del alumno (¿aunque haya demostrado estar mal de la cabeza?)
Así el tutor debería probar que el estudiante no ha alcanzado: 
1. las competencias básicas (Herminia condenó al alumno al ostracismo y falsificó los exámenes para intentar demostrarlo y aún así no lo ha demostrado) y
2. el adecuado grado de madurez. Último (y falso) clavo ardiendo al que Herminia se agarra al descubrirse las falsificaciones que realizó de los exámenes, sin embargo a su clase acude un niño de menor edad con alta capacidad de aprendizaje aunque sin la madurez de sus compañeros

¿Por qué condenar a Javier, un niño inteligente, a perder el curso y las amistades de su edad?
¿Por qué dañar su autoestima a los diez años por no ser capaces de enfrentarse a una maestra trastornada? 
¿Por qué crearle sensación de fracaso a pesar de haber sabido vencer  sobre las dificultades?

La directora, Begoña Criado, solo piensa en su sueldo. La consejera, Lucia Figar,en ser ministra (aun sin curriculum). Aguirre no tiene tiempo para cosas sin importancia como ésta.

yo confío en la Justicia.

lunes, 25 de julio de 2011

Las otras caras (o los otros caras)

Tras recibir un burofax exigiendo que se mostraran los exámenes de Javier a su madre, el colegio accedió.
En una reunión, la directora, Begoña Criado Hernanz , acompañada de otro personal del colegio y ausente la tutora Herminia Martínez Gómez, mostró las pruebas efectuadas.
¡¡ Los exámenes globales  de un niño de diez años al que han obligado a repetir curso estaban aprobados con notable!!
Allí se vieron los sistemáticos "errores" cometidos por Dña. Herminia en las correcciones de los exámenes de Javier. Preguntada la directora, Begoña Criado Hernanz,  por explicaciones sólo acertaba a emitir una risita nerviosa... temía que la estuviesen grabando.
No contaba con que la madre tomaría fotografías de todos los documentos para probar las falsificaciones. Los profesores asistentes a la reunión se miraban sobresaltados pero sin atreverse a abrir la boca, tal como habían acordado.
¿Es esta su vocación por la educación?. ¿Podemos seguir manteniendo con nuestros impuestos a quienes se comportan de modo tan dañino con los niños?


Anverso del examen visto al trasluz en el encabezamiento con la FALSIFICACIÓN realizada por HERMINIA MARTINEZ GOMEZ con el conocimiento de BEGOÑA CRIADO HERNANZ.


domingo, 24 de julio de 2011

Ex alumna de HERMINIA hace 15 años

Después de tantos años no me puedo creer que esto esté pasando. He sido alumna de Herminia hace más de 15 años, durante todo lo que duró mi primaria (desde primero hasta sexto). Considero que un gran porcentaje de mis compañeros ha sido maltratado física y psicologicamente por esta profesora. Pocos son los recuerdos que ya tengo, pero entre ellos hacer recoger su propio vómito a una compañera, no nos dejaba ir al baño, nos pegaba con un anillo en la cabeza y nos humillaba y ridiculizaba, hasta llegó a decir un día, con 7 años, que ese era el fin del mundo y una niña entró en crisis de ansiedad. Esto evidentemente fué descendiendo con los años y no era con todos mis compañeros ya que tenía sus “apreciados” (casualmente los hijos de los que ella consideraba los padres mas favorecidos, los que eran algo en la vida, los que habían estudiado, etc “porque esto para ella era algo muy importante”).
Decía conocernos “perfectamente” y sabía cuáles ibamos a llegar a algo en la vida y cuáles no, claro está que no se equivocó porque eso es lo que ella nos había influenciado durante años. A sus favoritos los hacía subir como la espuma y a sus menos agraciados los humillaba ante los demás, creándonos complejos para toda la vida y creando disputas entre nosotros por aquel entonces, y las etiquetas que ella nos puso aun hoy las tenemos entre nosotros. Ejemplo de ello eran las obras de teatro que hacíamos. en las que los de siempre eran los protagonistas, los de siempre los que pintaban los decorados y los de siempre los que íbamos detrás a recoger y limpiar...
A estas alturas se puede apreciar que yo no era de sus más agraciadas, no daré detalles de las cosas concretas que a mí me ha hecho, ya que quiero permanecer en el anonimato, pero solo diré que no sé si algún día podré liberarme de las secuelas que ido acarreando de mi infancia. Al pasar a la secundaria estuve con profesores maravillosos, que no solo me enseñaron a aprender, sino a creer en mí. Hoy soy lo que soy gracias a mi misma y he luchado mucho por crecer como persona (porque según ella nunca iba a ser nada en la vida...) y si por casualidad, la “señorita” Herminia, que era así como nos hacía llamarla, estuviese leyendo esto, y por cualquier atisbo, se pudiera imaginar quién soy, le diría que se equivocó conmigo.
Hace poco, estando de vacaciones, puse el televisor y para mi sorpresa veo una periodista en la puerta de un colegio “denunciando” la indignación de unos padres con una profesora en Las Rozas, ponían algunos ejemplos como que había tenido desatendido a un niño que se había roto un brazo y no lo llevó al médico, que a una niña no la había querido pasar de curso porque la consideraba inmadura... y fué ahí cuando le dije a mi pareja: “Es Herminia”. Para mi fué increible y me quedé atónita cuando la periodista dijo el nombre de esta profesora: Herminia Martinez Gomez, aquella que durante años había jugado con nuestra personalidad.
Al año siguiente de nuestro último curso con ella, empezó un nuevo curso con niños de primero de primaria (6 añitos), sé que los padres estaban descontentos y también avisaron a los medios, y creo incluso que la denunciaron porque al año siguiente abandonó el colegio, todos estos niños estuvieron en tratamiento psicológico. Según decian los medios incluso había pinchado en el brazo a un niño con una parálisis porque no le creía.
Años más tarde, por circunstancias propias de vida, que no tienen nada que ver con el asunto, acudí a una psicóloga. Un día, después de varias sesiones, cuando me preguntó por mi infancia y le hablé de mi profesora, no se lo podía creer, ella era la psicóloga que había trabajado con aquellos niños del curso siguiente. Esto para ella fué una clave para hacerme comprender muchos de mis complejos y temores.
Hace un año mis antiguos compañeros decidieron hacer una cena, y a última hora la invitaron. Por supuesto yo asistí, sabía que eso me ayudaría a enfrentarme a mi pasado, simplemente le mostré indiferencia. Como era de esperar no había cambiado nada, seguía totalmente igual, y me sorprendió muchísimo que seguía juzgándonos y etiquetándonos de la misma manera, pese a que han pasado los años y todos hemos cambiado. No le guardo ningún rencor, bueno ciertamente si... solo me dió rabía el que para ella al volver a vernos y ver “quien había llegado a algo en la vida y quien no” (aunque en mi caso y en el de algunos compañeros no fué asi) y que se habían cumplido sus “presagios” fué muy gratificante para ella . Dijo: “si ahora volviese a vuestro primer año, volvería a hacerlo todo como lo hice”, me hubiese gustado rebatirla, pero después de tantos años ese miedo a contestarla, incleiblemente se volvió a apoderar de mi.
Para finalizar diré que no me extraña nada que esto esté pasando, y no quiero ser mala pero me alegro muchísimo porque tiene lo que se merece, me alegro también, de que ahora haya padres que tienen el valor de denunciar y, lo más importante, de creer a sus hijos, digamos que los nuestros, por cuestiones de época también estaban influenciados por ella...
Seguramente, como los de inspección pasan de todo seguirá en la educación, creando niños aplacados... Aunque espero que esto no suceda. Aun así no le quedará mucho ya para la jubilación, si es que no ha pedido un aplazamiento, que no me extrañaría nada porque esto lo hace por maldad, para divertirse a costa del sufrimiento de unos pobres inocentes, por vocación como nos decía a nosotros...

miércoles, 20 de julio de 2011

Sin respuesta de la consejera LUCIA FIGAR

Carta dirigida a LUCÍA FIGAR LA CALLE, consejera de Educación de la CAM y máxima responsable:


Estimada Consejera,

Mi sobrino, Javier. de diez años, ha cursado durante el ejercicio 2010-11 4º de ESO en el CEIP Los Jarales de Las Rozas.

En este curso la tutora encargada de su curso ha sido Dña. Herminia Martínez Gómez.

El mismo mes de comienzo del curso, en septiembre de 2010, ya comunicó a la madre del niño que éste repetiría curso. Lo mismo hizo con los padres de otros alumnos a los que sin ambages no tuvo problema en realizar afirmaciones vejatorias o ridiculizantes sobre sus hijos.

Algunos de ellos, viendo acrecentarse los problemas según el curso avanzaba, decidieron cambiar de colegio a sus hijos.

Mi hermana, segura de las virtudes de Javier, sabía que fueran cuales fueran las dificultades, él podría por su simpatía e inteligencia modificar la errónea impresión que su tutora hubiera podido tener.

No fue así: Dña Herminia condenó con sus razones a mi sobrino al ostracismo en su clase. Le negó la posibilidad de aprender y de realizar exámenes. Mientras sus compañeros atendían sus clases, a él le obligaba a realizar ejercicios de caligrafía. Segura de que de esa manera podría justificar en los exámenes globales su falta de aprendizaje.

Sin embargo al detectar en casa el problema, Javier recibió clases particulares de las materias que no recibía en su colegio y aprobó los exámenes de la comunidad de Madrid con notas que superan la media de su colegio a pesar de las dificultades.

Daba igual, Dña Herminia, nombrada  tutora de un niño de nueve años a pesar de su conflictividad, ignoró los resultados de esas pruebas, los ocultó mientras pudo e incluso llegó a alterarlos burdamente con tipex para proceder a colocar una nueva nota, un cero en dictado, que a su trasluz todavía permite ver la nota original.

En numerosas ocasiones a lo largo del curso, la madre solicitó ayuda académica a su tutora, que no dio jamás ningún apoyo. Javier no recibió clase de refuerzo alguna.

En varias ocasiones se contactó con la dirección del centro y la inspección en Villalba, quienes estaban al tanto de la conflictividad de esta profesora, pero aunque la inspectora se presentó, nada ha trascendido de lo que hizo por investigar las irregularidades cometidas.

Por todas estas razones se presentó una denuncia, que con el tiempo se resolverá. Mientras tanto, un niño de 10 años ha sido condenado a perder curso por el delito de estar en una situación familiar que disgusta a su tutora a pesar de que no la conoce ni puede enjuiciarla. Los siete alumnos de 5º de ESO que tuvieron que abandonar el colegio pertenecían a familias de padres separados o divorciados. El primer día del curso, el primer día, Herminia solicitó que quienes estuvieran en esa situación alzaran la mano. Los siete que la alzaron son los siete que tuvieron que irse tras sufrir el acoso, marginación y vejaciones de su profesora.

Para sorpresa del director de su último instituto el año anterior, el IES Carmen Conde de Las Rozas, donde por sus problemas quedó relegada a una sola clase de apoyo, Herminia ha seguido dando clase a niños. Esta vez de nueve y diez años. Siendo incluso tutora del grupo de los más pequeños.

Deseo solicitar de Vd. una entrevista que me permita comentarle en detalle la situación, mostrarle los documentos, informarle del daño psicológico causado a unos niños  y solicitarle, no ya una revisión de los resultados académicos de mi sobrino Javier, sino también la realización de una evaluación psicológica y profesional de Dña. Herminia Martínez Gómez que permita su exclusión urgente.


Le ruego por anticipado que disculpe la insistencia de mis llamadas, pero creo que es mi obligación hacia mi sobrino y los niños conseguir que esta profesora no pueda hacer más daño.

Reciba un atento saludo

La consejera ni siquiera respondió. Tras nuevas llamadas su secretaria afirmó haber dado traslado a la dirección competente y "tomó nota".
Esta es la sensibilidad de la consejería de Educación de la comunidad de Madrid: Tomar nota.
El día 3 de agosto de 2011 el DEFENSOR DEL PUEBLO ha exigido a la consejera LUCÍA FIGAR un INFORME. Lástima que sólo se le haya podido exigir su responsabilidad de esta manera. 


domingo, 3 de julio de 2011

Sonriendo, Herminia Martínez Gómez acudió al Colegio Los Jarales en su primer día. Poco le importaba que en el curso anterior en el Instituto cercano la hubieran relegado a dar una sola clase de apoyo por su conflictividad. "Soy funcionaria y me tienen que aguantar" - se dijo.
Ella tenía claro qué iba a hacer: demostrar de nuevo que los niños de familias (que ella define como) desestructuradas  son unos tarados que nunca llegarán a nada.
Es cierto que para ella su idea de éxito personal o profesional no coincide con la de los demás. Su solitaria existencia, su triste diplomatura y el rechazo que provoca en padres y alumnos de sus colegios e institutos no aparentarían éxito alguno más que vistos desde un trastorno.
Por alguna inquietante razón que el director de su anterior instituto dijo no comprender, Herminia sigue ejerciendo su profesión de maestra, esta vez con niños de nueve y diez años, siendo incluso tutora de un grupo de 4º de Eso.
Su primera semana consistía en un interrogatorio a los niños para averiguar sus circunstancias, más bien las de sus padres, y a partir de ahí condenarlos al ostracismo en las clases, de tal manera que sus exámenes demostraran su teoría.
Herminia cree identificar capacidad de un alumno de un vistazo, y tiene todo el curso para demostrar a los demás esa capacidad. Más que pedagoga se precia pues de ser hechicera.